El entorno del Albergue La Palaina transmite tranquilidad. El Guijar está enclavado entre suaves colinas, y sus senderos y caminos invitan al paseo y a la buena conversación. No hay que alejarse mucho para escuchar el sonido de la naturaleza, respirar y disfrutar de bonitas vistas.
Hasta los pueblos vecinos, muy cercanos, se puede llegar a pie, bordeando montes de encinas, enebrales y sabinares, o por pistas rurales entre girasoles y tierras de cereal. Chopos, olmos y fresnos también se integran en un paisaje que sobrevuelan rapaces y cigüeñas negras.
Fundiéndose con el entorno, unas pocas iglesias románicas aún permanecen en pie. Aparecen recortando el horizonte, o bien a orillas de algún arroyo, o en el interior de los pueblos. En un radio de muy pocos kilómetros hay varios ejemplos: Valdevacas, Caballar, La Cuesta, Muñoveros y Sotosalbos son las más próximas.